Hay ciertos momentos que merecen ser reconocidos como hitos, como verdaderos logoros que podrían, dependiendo de las circunstancias, volverse historia, pivotes en los que lo que suponíamos de una manera se transforma arrastrando otors aconteciemientos... Tal es el caso de la noche en que la bella Adriana decidió salir a las calles de su Sao Paulo natal y mostrar su cuerpecito casi de adolescente a los conducotres de los autos y camiones que pasaban por la autopista... El desastroso accidente es todavía recordado y va rumbo a transformarse en una leyenda urbana
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